Ingredientes: 2 Pechugas de Pato 1 Pizca de sal 1 Pizca de tomillo 1 Pizca de Condimentos Preparación: Si has com...
Ingredientes:
- 2 Pechugas de Pato
- 1 Pizca de sal
- 1 Pizca de tomillo
- 1 Pizca de Condimentos
Preparación:
Si has comprado la carne congelada, es importante que a la hora de cocinar pato las piezas se hayan descongelado a temperatura ambiente. Evita utilizar el microondas porque al descongelar, la carne suele cocinarse un poco en el centro. Dispón las dos pechugas y unta un poco de sal común en ambos lados.
A continuación, el siguiente paso será sellar la carne. Seguro haz escuchado este termino anteriormente. Sellar la carne quiere decir cocinar con fuego muy alto para formar una costra y evitar que la carne pierda sus jugos, Para hacer esto, pon una sartén a fuego alto y cuando este bien caliente coloca las piezas de carne en él. Cocina por unos 2 minutos máximo cada lado o hasta que veas que la parte de la grasa esta completamente dorada y crujiente.
Luego coloca las piezas de pato en una fuente para horno y adoba al gusto. Yo he utilizado pimienta de distintos tipos, tomillo y semillas de mostaza. El tomillo es un condimento que le va perfecto al pato. Agrega suficiente cantidad para que la carne absorba el sabor. Aliña el pato por ambos lados
El siguiente paso es cocinar en el horno la carne.
Para ello dispón las piezas de pato con la cara de la grasa hacia arriba. Coloca la bandeja un poco más arriba del medio y programa por 12 minutos a 180º. El tiempo de cocción dependerá del gusto, pero el pato, al ser una carne salvaje, es preferible comerla poco hecha, de lo contrario tiende a secarse mucho.
El pato al horno es una excelente opción para la cena de Navidad o cualquier reunión en familia.
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Pasado el tiempo, saca la carne del horno y haz cortes de forma vertical. Si ves que esta muy poco hecho para tu gusto puedes volver a cocinar el pato una vez que lo hayas cortado. Quita el exceso de sangre con un papel absorbente.
Finalmente añade un poco de sal maldon sobre el pato al horno y buen provecho. La sal gruesa, en hojuelas, y la puedes comprar en cualquier supermercado. El pato es un carne salvaje y como tal combina perfectamente con sabores dulces, así que si lo deseas puedes acompañarlo con una salsa de frutas o mermelada.
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